25 de junio de 2025
2 vasos de garbanzos cocidos.
2 cucharas de sésamo tostado.
2 cucharaditas de jugo de limón.
Sal.
Hierbas provenzales.
Pimienta.
Una cucharada de AOVE
Se baten todos los ingredientes, dejando garbanzos para emplatar como topping.
Para dippear, podemos usar diferentes verduras al gusto.
Alto contenido en Fibra. Como legumbre que es, tiene un alto contenido en fibra hidrosoluble. La fibra soluble, al aumentar el volumen en el estómago, confiere a los garbanzos una gran capacidad saciante. Además, la fibra soluble es muy apropiada para combatir enfermedades cardiovasculares, así como para la prevención del estreñimiento.
Hidratos de carbono de absorción lenta. Los hidratos de carbono presentes en los garbanzos, se asimilan por el organismo de forma muy lenta. Esto tiene dos beneficios: por un lado, la energía que proporcionan se libera de forma lenta, haciendo que se retrase la aparición de hambre y por el otro, regula los niveles de azúcar en sangre, lo que los hace muy apropiados para las personas con diabetes.
El humus no es, en sí mismo, una comida de dieta, ya que tiene aceite de oliva y pasta de sésamo. Pero contiene abundante fibra que sacia, con pocas calorías (177 Kcal por cada 100 gramos) que evita que piquemos otras cosas que engordan más, y además comemos legumbres.
